30 mayo del 2021
El Parque Natural Paramillo, un santuario natural.
Por Sofía Esmeralda Meza Valle
A dos días del Municipio de Peque por un difícil camino de herradura se encuentra el Parque Natural Paramillo, declarada zona de reserva y Parque Natural el 2 de mayo de 1977.
Un grupo de Pequenses decidieron hacer este gran recorrido, entre ellos se encuentra Duván Estiven Torres, de 25 años, concejal y Contador Público independiente, quien relata, qué maravillas atesoran las 504.014 hectáreas que componen este gran paraíso.
Este hermoso lugar está ubicado en el extremo norte de la Cordillera Occidental en Colombia, su altura oscila entre los (350 y 3960 MSNM). Alberga comunidades indígenas que datan al menos de 13.000 años atrás, cuando se dieron los primeros asentamientos en el Departamento de Antioquia, dentro de los que podemos destacar los Embera-Katío y los Chamí, a partir de ese momento se han convertido en los guardianes de este pulmón verde; desde la caza, la pesca y los cultivos agrícolas tienen una actividad económica para el sustento de sus familias.
Grupo de jóvenes del Municipio de Peque en el Nudo del Paramillo. Foto, Alexis Vera.
Después de un mes de tanto ruido y colores en el cielo que daban la bienvenida a un nuevo año, este grupo de jóvenes decidió emprender un largo viaje de camino, rumbo a un lugar lleno de magia.
“Visitar Paramillo ha sido una tradición de nuestros ancestros, tanto de los habitantes del corregimiento de los llanos, como de los habitantes de la vereda San Mateo. En redes
sociales vimos un oriundo de la vereda San Mateo radicado en Medellín que publicó su aventura en las redes, lo buscamos y con él programamos la visita, desde entonces hemos venido realizando visitas consecutivas para mantener la tradición.” Expresa Duván Torres, afortunado visitante.
En el Nudo del Paramillo como muchos lo conocen, prevalece la condición montañosa con suelos de topografía abrupta y escabrosos terrenos, facilitando así la proximidad de situaciones esenciales como páramo, planos inundables, acompañados por bosques húmedos tropicales y andinos nublados, que lo embellecen y le dan un toque fantástico.
El 9 de enero de 2019 comenzaron la gran aventura, en un día bastante caluroso se podía apreciar una larga fila de caminantes sudorosos y alegres que liberaban endorfinas y calorías. A medida que avanzaban por estos caminos que parecían eternos circulaba una energía única y especial.
“El recorrido lo realizamos por los termales ubicados en la vereda Toldas, el viernes salimos a la una de la tarde y llegamos a la zona de primer campamento en la vereda San Mateo a las cinco de la tarde. El sábado a eso de las seis de la mañana decidimos continuar, las personas que tenían mejor estado físico llegaron a las once de la mañana y los últimos llegamos a las tres de la tarde; en conclusión, fueron dos días para ascender.”
Esta gran reserva cuenta con varios de los afluentes más ricos en la región, las bellas corrientes Sinú, Manso, Tigre, Esmeralda y Verde que conforman la subzona hidrográfica del Alto Sinú; todos ellos son tan importantes como los Cauces de San Jorge, Sucio, San Pedro y Uré que conforman el área hidrográfica del Alto San Jorge, además comprende áreas como el conducto Ituango, los más exóticos cauces Tarazá y Peque del tazón del Cauca.
Por lo general existen notables registros de 755 tipos de plantas en flor que adornan con sus colores cada rincón de este magnífico lugar, dentro de las que se encuentran el manto, canela, masabalo, nazareno, almendra, brutal, canino, vidrio, coco, arbusto, balaustre, cedro, roble de tierra fría, carbón, ceiba tolua, caoba, brasilete o azulito, dorado entre otros; gran parte de estas especies se encuentran en vía de extinción.
“Paramillo es el paraíso de Peque, no cualquier persona tiene el privilegio de llegar al páramo, somos pocos los afortunados que hemos subido hasta este paraíso. Son tres las motivaciones: la primera es visitar el páramo, la segunda decir ¡Estoy en una de las montañas más altas de Antioquia! y tercero, los páramos son conocidos como fábricas de agua, es grandioso llegar al lugar donde nacen muchas de las quebradas de Peque; varias montañas adornadas por frailejones que hacen que sea un paisaje inolvidable”. Afirma el joven en medio de una sonrisa.
Como si fuera poco, también se encuentra una hermosa diversidad de fauna, tales como, oso de anteojos, danta o asno danto, puma, jaguar, mono colorado o mono aullador, tamarin de algodón, marimonda o mica prieta, marteja; además de tipos distintivos de colibríes y aves como: guacharacas, perdices, águila blanca, cotingas, pipirido, tiránidos, mirla negra, mieleros y azulejos montañeros.
Duván, ha tenido la oportunidad de visitar este lugar tan espectacular en varias ocasiones, la primera vez lo disfrutó poco, pues no estaba preparado físicamente, estaba agotado y quemado todo el cuerpo, además de que hizo un frío impresionante. Una vez que ya estaba en casa descansando, al ver las fotos y los vídeos filmados en los hermosos paisajes que ofrece este lugar, se propuso volver a Paramillo y motivar a más personas para llegar hasta la cima.
“En Noviembre de ese mismo año volví a hacer el recorrido, pero ya me había preparado físicamente, además de llevar lo necesario para visitar un páramo; la segunda vez me lo disfruté mucho, pude recorrer todo el páramo y visitar la laguna; la verdadera satisfacción fue motivar a más personas para visitar el Paramillo, desde aficionados, universitarios y docentes.”
Duván Torres en el cerro de Santa Bárbara. Foto, Camilo Graciano.
En esta excursión tenían planeado un recorrido de tres días, tuvieron la oportunidad de avistar un oso de anteojos y subir hasta la cima del cerro de Santa Bárbara, el punto más alto de Paramillo (3.776 MSNM), a medida que avanzaban por sus diferentes caminos y senderos, los sonidos de la fauna se mezclaban con el aire que golpeaba los árboles nativos que allí se encuentran. La magia de este lugar cautiva tanto que varios estudiantes de la Universidad de Antioquia que iban con él estaban tan felices que no se querían devolver.
“En últimas nos tocó devolvernos porque una persona de las que iba conmigo debía trabajar, el descenso comenzó alrededor de las nueve de la mañana llegando a los termales a las cuatro de la tarde. Definitivamente esta excursión fue la mejor de muchas que he hecho hasta el momento; ver personas con obesidad cumplir este reto tan grande es demasiado gratificante.”
El Parque Natural Paramillo, la segunda reserva natural más importante de Colombia, un espacio donde se respira Oxígeno puro y te permite descubrir la belleza y la paz que te conecta con la naturaleza.
“Yo recomiendo un turismo responsable con el medio ambiente en el Parque Nacional Paramillo, es uno de los últimos páramos por descubrir, desde las cimas se pueden ver altas montañas como el Páramo del Sol o Farallones del Citará. Es una experiencia inolvidable, no te quedes sin visitar este santuario natural.”
La verdadera riqueza de la humanidad está en la naturaleza, porque los tesoros más valiosos están formados de ella. Ahora Duván recuerda con emoción cada momento de esta gran experiencia y espera que muy pronto pueda volver a visitar este excepcional pulmón verde.
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